Agenda llena
El orden del día de la Comisión de Ambiente está conformado por 39 proyectos de ley que abordan temas bastante diversos y urgentes para nuestro país. Se inicia con iniciativas de ley sobre participación ciudadana, pasa por reformas a la SETENA, protección de ríos y cuencas, prohibición del uso de estereofón, moratoria a los transgénicos y finaliza con la autorización a los Gobiernos Locales para adoptar suspensiones para actividades dañinas para el ambiente.
Muchas de esos proyectos de ley, presentados por nuestra Fracción, también coinciden con las promesas del ahora Partido de Gobierno, que fueron hechas en campaña electoral. Sin embargo, para el periodo de sesiones extraordinarias que va del primero de noviembre anterior al 30 de abril del próximo año, el Poder Ejecutivo decidió convocar solamente uno de los proyectos de ley: ¡el de pesca de arrastre de camarón!
Propuesta Inviable
Hemos insistido por varios meses, en que esta propuesta planteada, no tiene ni pies ni cabeza. No cumple con los estudios técnicos que se requieren, para demostrar que la pesca de arrastre es compatible con el derecho fundamental a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado, por una sencilla razón: ¡esta actividad es insostenible!
Durante los casi seis meses que lleva el proyecto de ley en su trámite legislativo, hemos recibido jarras, gorras, carpetas, lapiceros, llaves mayas, enviadas desde el INCOPESCA. Aun así, en medio de una intensa campaña para convencernos, la estrategia verdaderamente importante que es la discusión de fondo, la negociación, ha sido postergada. Hemos señalado errores importantes en el texto, y no recibimos ni una sola respuesta al respecto. A golpe de tambor y en el ejercicio de sus facultades, el Gobierno aprovecha para forzar una discusión que, de avanzar, tendría solo un resultado posible: la declaratoria de inconstitucionalidad del Alto Tribunal.
Necesidad de buscar alternativas
Entonces, estamos en un escenario donde el Estado invierte recursos en regalos, se invierten horas de discusión, se atrasan proyectos de impostergable discusión, para al final, no resolver nada. Desde este espacio, hacemos un llamado al Gobierno para que redirija esos recursos para promover la capacitación y la migración de las familias dedicadas a la pesca de arrastre a otras actividades que permitan su sustento económico, sin afectar el equilibrio del ambiente marino.
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