Hemos venido compartiendo información sobre el feminicidio político de la compañera ecologista Berta Cáceres. Por eso, ante la noticia de que el pasado diciembre, Luis Guillermo Solís y Carlos Obregón (presidente del Instituto Costarricense de Electricidad) viajaron a Honduras, estamos enviando una carta dirigida al presidente de la República.
En primera instancia, le solicitamos un informe sobre su visita a aquel país, con especial atención sobre los acuerdos que se tomaran para que el ICE cooperara en la construcción de la represa hidroeléctrica Agua Zarca, cuya oposición fue la bandera de lucha de Berta en los últimos años, y que ha sido señalada por su familia como posible motivo de su muerte. De ser cierta la participación del ICE en esta obra, le estamos solicitando al señor presidente, que el Gobierno de Costa Rica retire su participación de forma inmediata.
En segundo lugar, en relación con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), le estamos pidiendo al presidente que nuestro país, en su calidad de socio de dicha entidad bancaria, que solicite acciones concretas e inmediatas, dirigidas al congelamiento y la cancelación del financiamiento aprobado desde el 2012 para la realización de la hidroeléctrica en cuestión.
Berta fue asesinada, según se ha denunciado públicamente, porque esa era la única manera de callar su voz de mujer valiente que no dudaba en alzarse en contra de los megaproyectos que amenazaban los recursos naturales y el territorio indígena lenca, en Honduras. Nuestro país no puede tener participación de ningún tipo en proyectos que, si quiera se sospechen, vinculados a actos de violencia y represión.
Fotografía tomada de: Goldman Environmental Prize
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